Excursión al Pontón de la Oliva

Senderismo por orillas del Río Lozoya, paseo por la presa de Pontón de la Oliva y admiración a la pared de escalada.

 

En la ruta poco marcada del Cerro de la Oliva nos encontramos con que el camino se acababa y había un río. 

¡Un río!
Un río profundo y frío.
Por encima no podemos pasar,
por abajo no podemos pasar.
Ni modo...
lo tendremos que atravesar.

Quien haya leído "Vamos a cazar un oso" sabrá lo que ha sido esta excursión. Atravesamos un campo, un río, barro, un bosque y llegamos a la cueva.

Excursión a Pontón de la Oliva

  • Duración: 5 horas, con descansos para comida
  • Itinerario: Aparcamiento - Cueva del reguerillo - Camino Canal de la Parra - Río Lozoya Presa de Pontón de la Oliva
  • Desnivel: 200 mt.
  • Dificultad: Fácil
  • Distancia: 9,5 Km
  • Observaciones: Es una ruta fácil y agradable con niños. Es una ruta con historia, por pasar por la primera presa construida en Madrid y la presa añade emoción, con pasillo junto a la roca. Frente al paso hay una gran pared de escalada, que no siendo para niños, les encanta verlo. En verano es fresquita por la mitad del sendero junto al río.

La ruta es una Ruta Circular de unos 9,5 km que inicia en el aparcamiento de la presa del Pontón de la Oliva. Si andamos hacia las cueva del reguerillo, hacia arriba del aparcamiento, haremos la primera parte de la ruta con más desnivel y dejaremos para la segunda el río y la visita a la presa. Nosotros la hicimos al revés, iniciando por la presa, que se encuentra bajando del aparcamiento o en línea si aparcáis en el primer aparcamiento. Si se va en verano con niños menores de 5 años es mejor ir directamente a la zona de la presa y dar un paseo porque la ruta circular puede hacerse larg.

Para llegar desde Madrid hasta el Pontón de la Oliva hay que ir A-1 (autovía de Burgos), salir dirección Torrelaguna por la N-320, dirección Patones por la M-102 y luego un pequeño tramo de la carretera del Atazar, la M-134.

El aparcamiento es sencillo, pues cuenta con tres zonas para dejar el coche. En fin de semana es preferible llegar antes de las 11h. Y si no queda hueco se puede subir hasta la entrada del camino de servicio del Canal de la Parra.

En el paseo por el margen izquierdo del río y bajo la zona de escalada junto a la presa, hay varias explanadas de hierba donde parar a descansar y hacer un picnic. Realizamos la ruta con niños entre 4 y 10 años, asi paramos a menudo a jugar, beber agua o comer algo. Por ello, nos llevó 5 horas.

Entre lo más divertido de esta ruta, elegimos los árboles grandes con ramas bajas a las que subirse, una cabaña de palos en la orilla del río y cruzar el rio con los pies descalzos y los pantalones remangados.

¡Ojo! La zona del río es zona inundable, así se advierte por carteles informativos del Canal de Isabel II.

La vegetación va variando por la ruta y son muy características las Jaras pringosas por el Cerro de la Oliva. En mayo encontramos las jaras en flor.

Es una ruta con historia.

Historia

La primera presa de Madrid se construyó en el Pontón de la Oliva, sobre el río Lozoya, en el siglo XIX.

El 24 de junio de 1858, tal día como hoy de hace 160 años, las aguas del río Lozoya llegaron por primera vez a Madrid capital. Desde el embalse del Pontón de La Oliva, recorrieron más de 70 kilómetros por un canal, aún en servicio, que finalizaba en un depósito de la calle Bravo Murillo para luego distribuirse por la ciudad. Diseñada por los ingenieros Rafo y Ribera, esta gran obra de la ingeniería del siglo XIX permitió a la ciudad de Madrid solucionar sus problemas de abastecimiento de agua y afrontar su crecimiento y modernización.

En su momento, la construcción de la presa y el canal fueron la mayor obra hidráulica de Europa. El conjunto de infraestructuras que formaban el proyecto, aunque parecía algo fantástico para la época, tenía tal visión de futuro que, en la actualidad, siguen funcionando algunas de las instalaciones originales.

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