l’Île d’Yeu: un día en bici por la isla

Explorar l’Île d’Yeu en bicicleta con los niños es una experiencia inolvidable. El circuito Vendée Vélo ofrece un recorrido perfecto para descubrir la belleza natural de la isla, desde sus playas hasta su rica historia. Además, la oportunidad de disfrutar de especialidades locales, como el delicioso feuilleté framboise, convierte esta aventura en una experiencia completa y deliciosa para toda la familia. Al final del día, tanto adultos como niños se llevarán el recuerdo de un día lleno de naturaleza, diversión y sabores inolvidables.

l’Île d’Yeu: un día en bici por la isla

L’Île d’Yeu, situada frente a la costa atlántica de Francia, es el destino perfecto para una escapada en familia. Sus paisajes cautivadores, playas vírgenes y un ambiente encantador la convierten en un lugar ideal para explorar en bicicleta. Un recorrido por la isla a través del circuito ciclista "Vendée Vélo" ofrece la oportunidad de disfrutar de la naturaleza y la cultura local, mientras que el delicioso dulce local, el feuilleté framboise, se convierte en la recompensa perfecta para toda la familia.

Llegada a l’Île d’Yeu y el mercado matinal

El día comienza con la llegada a l’Île d’Yeu en ferry desde Fromentine o Saint-Gilles-Croix-de-Vie. El trayecto dura alrededor de una hora, y al desembarcar en Port-Joinville, te recibirá el pintoresco puerto de la isla. Antes de comenzar la aventura en bicicleta, una visita al mercado matinal es imprescindible. Este mercado local, lleno de productos frescos como frutas, quesos artesanales y panes crujientes, también ofrece una especialidad que encantará a los niños: la feuilleté framboise. Este delicioso hojaldre relleno de frambuesa es una delicia local que puedes comprar como un anticipo del merecido premio al final del recorrido.

Recorrido en bici por el circuito Vendée Vélo

Una vez hayas adquirido tus provisiones en el mercado, es hora de comenzar el recorrido en bicicleta por el circuito Vendée Vélo. Este sendero está perfectamente señalizado, lo que lo convierte en una opción segura y fácil de seguir para las familias, con señales direccionales en el suelo y carteles que indican el camino a ciclistas y caminantes. Antes de partir, debes elegir la dirección de tu paseo:

  • Desde la Place des Bois Noirs hacia el pueblo de La Croix, que te llevará a través de encantadores paisajes rurales, con campos de brezo y molinos de viento.
  • Desde la Oficina de Turismo hacia el Bosque de la Citadelle, un recorrido costero donde las vistas del Atlántico son espectaculares.

Ambas rutas ofrecen paisajes que impresionarán tanto a niños como a adultos, con numerosas oportunidades para detenerse y disfrutar de la naturaleza. Al final de artículo os dejamos la ruta tal y como la hicimos nosotros.

Descubriendo la isla: Castillo Viejo y la costa

Una parada imprescindible durante el recorrido es el Castillo Viejo (Le Vieux Château), una fortaleza medieval que se alza sobre los acantilados de la isla. A los niños les encantará explorar las ruinas del castillo y dejar volar su imaginación con historias de caballeros y piratas. Las vistas panorámicas del océano desde aquí son magníficas, lo que convierte esta parada en un punto destacado del paseo.

Si sigues la ruta costera, llegarás a playas como la Plage des Sabias, donde podrás hacer una pausa para que los niños disfruten de la arena y el mar. Esta playa es tranquila y segura, ideal para que los más pequeños corran libremente mientras los adultos se relajan con las vistas del Atlántico.

Almuerzo en la Plage de la Gournaise

Tras una mañana de pedaleo, una parada para almorzar es fundamental. Con las provisiones adquiridas en el mercado matinal, puedes disfrutar de un picnic en la Plage de la Gournaise, una cala escondida con aguas cristalinas. Los niños pueden jugar en la arena mientras disfrutas de un merecido descanso rodeado de la belleza natural de la isla.

Tarde en Port-Joinville: tiendas y el dulce feuilleté framboise

Después de un día de aventuras, regresa a Port-Joinville para disfrutar de una tarde más tranquila. Este encantador puerto tiene varias tiendas y las calles del interior una Creperie. Es un buen momento para recorrer el centro paseando tranquilamente.

Pero sin duda, el momento más esperado de la tarde es la visita a una pequeña y acogedora pastelería local, donde podrás disfrutar de la famoso feuilleté framboise. Este hojaldre crujiente relleno de una suave y deliciosa crema de frambuesa es el capricho perfecto para toda la familia. Tras un día en bicicleta disfrutar de este dulce mientras observas el puerto es una recompensa que tanto los niños como los adultos adorarán. La feuilleté framboise es un premio ideal, una delicia que se convertirá en el recuerdo más dulce de tu aventura en la isla.

Consejos prácticos para un día en bici con niños

  • Barco: Lo primero que tienes que conseguir son los billetes de barco tanto de ida como de vuelta. Si tienes pesnado visitar la isla hazlo con tiempo y en función del día que saques los billetes organiza la ruta en bici o excursiones que queráis hacer.
  • Alquiler de bicicletas: En Port-Joinville hay muchas tiendas de alquiler que ofrecen bicicletas de diferentes tamaños, así como remolques o sillas para los más pequeños. También hay disponibilidad de biciclestas eléctricas. Si os sentís más tranquilos podéis reservar la bicicleta por teléfono o mail con alguna de las tiendsa.
  • Seguridad: Sigue las señales del circuito Vendée Vélo. Y si te hace falta sigue la ruta con un navegador o gps.
  • Provisiones: No olvides llevar agua y bocadillos para mantener a los niños hidratados y con energía.
  • Ropa adecuada: El clima puede ser variable, por lo que es aconsejable llevar ropa en capas y algo para protegerse del viento. Mira el tiempo que hará de cara a la ruta antes de ir y lleva protección solar.

Ruta en fatmap:

 

Ruta en strava:

 

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